En lo que va de siglo, los cambios constantes son una constante, válgame la redundancia. La evolución o los cambios de paradigma, llamémoslo como mejor nos venga, son algo inevitable e ineludible. Todos los ámbitos se han visto salpicados por algo convertido en universal: las nuevas tecnologías de la comunicación. En el terreno de lo laboral, el concepto de trabajo ha ido mutando en muchos sectores, pasando de trabajar en una empresa a hacerlo desde casa o en coworking como Mitre 126. Cambiando la metodología de trabajo, no es de extrañar que exista un cambio en el perfil del trabajador, algo que ha dado lugar al trabajo soñado por muchos: el nómada digital.
Ser nómada digital, consiste en una reinvención laboral que conlleva un cambio laboral y supone un estilo de vida que permite trabajar en cualquier lugar del mundo. Mediante el uso de internet para el desempeño de las funciones, un nómada digital puede trabajar en remoto de tal manera que puede permitirse el lujo de viajar y llevar esa vida nómada que procura libertad de movimiento.
Un nómada digital, posee libertad de movimiento, no necesita una oficina o un despacho, pues el mundo es su espacio. Cualquier lugar es válido para trabajar si se dispone de una conexión a internet. Pueden dedicarse a diferentes sectores y trabajar en distintos modelos de negocio como el freelance, el emprendedor o el que trabaja por cuenta ajena. Conforma un estilo de vida, más que un tipo de trabajo, en el que se aúnan los cambios que experimentamos a nivel laboral y la decisión de tomar el control de la propia vida y llevarla a tus preferencias en lugar de sucumbir a las normas que dicta la sociedad.
Si eres de esas personas que persiguen trabajar en algo que les haga sentir satisfechos, contar con una buena remuneración y conocer mundo, puedes hacerlo.
Cambios en la cultura del trabajo
Ahí esta la clave, la cultura del trabajo que tenemos desde hace décadas que ha visto la oportunidad de cambio. Tras la revolución industrial, momento histórico clave que procuro un cambio enorme en la forma y metodología de trabajo, no ha habido hasta la aparición de internet, otro cambio tan significativo. Entrar de lleno en la era de la información de la mano de las nuevas tecnologías han generado un cambio social a todos los niveles. El ámbito laboral, no podía ser menos, de hecho, ha sido uno de los aspectos vitales mas beneficiado por estas tecnologías que copan todos los sectores.
La manera que tenemos de comunicarnos con los demás, como establecemos las relaciones y la forma de interpretar el mundo, son otros aspectos en los que la era de la información, ha hecho mella.
En el terreno laboral, el cambio de la cultura del trabajo y el nomadismo digital, tienen mucho que ver, puesto que ambos se retroalimentan de manera inevitable. El presentismo en el puesto de trabajo, calentar la silla sin motivación y sentirse obligado a realizar una función poco valorada en trabajos que no favorecen en nada la motivación, anulan las capacidades personales.
Internet, ha propiciado que surja una nueva concepción en este terreno: trabajos mas libres e independientes donde se deja a un lado el modelo jerárquico al que estamos acostumbrados, en el que el jefe manda y el empleado, acata, para dar paso a un modelo en el que se permite al trabajador implicarse. La toma de decisiones y el esfuerzo de los empleados son determinantes a la hora de alcanzar los objetivos de la empresa. Ya no se trata de pasar horas muertas en la oficina, ahora se trata de obtener resultados, sin que ello implique hacer horas de más con el consiguiente desgaste.
Ser nómada digital, es la alternativa laboral y vital emergente. Pasamos por un tránsito, alejándonos de la programación a la que estamos sometidos: nos han inculcado el estudio, la consecución de un buen trabajo, casarse, comprar una casa, formar una familia… estabilidad y rutina. La ruptura del concepto, hace posible que la idea de permanencia y necesidad de estar en un sitio, desaparezca y se abren las puertas a un estilo de vida más pleno y libre. Esto incluye poder vivir viajando y trabajando sin ser víctima del sistema. Alcanzando una línea de pensamiento que permite a cada persona hacerse más responsable de su vida. Cada uno decide lo que quiere para sí mismo, determina la vida que quiere llevar y actúa en consecuencia.
Inevitablemente, la presión social, permanece. No es algo que se pueda erradicar sin más, pero al adquirir conciencia por parte de la persona de que la responsabilidad de su vida, es solamente suya, se permite actuar con mayor libertad.
Convertirse en nómada digital es posible y lleva de la mano esa libertad de pensamiento y esa sensación de responsabilidad que libera. Aunque existan dudas al respecto, es posible trabajar en lo que te gusta, tener un buen sueldo y vivir viajando. No solo existe la posibilidad de trabajar para otros, puedes montar tu propio negocio que te permita llevar la vida soñada.
En este punto, lo más conveniente es hacer un mínimo análisis sobre la situación laboral actual: muchos puestos de trabajo están desapareciendo, justamente por la presencia de las nuevas tecnologías, muchas tareas pueden automatizarse. Esto que genera perdida de puestos de trabajo, produce a su vez, la generación de nuevos empleos. Trabajos que actualmente son una oportunidad debido a la demanda y la poca oferta que implica mayor remuneración.
Con la automatización, es posible obtener ingresos pasivos sin tener que realizar esfuerzos ni invertir tiempo. Un claro ejemplo es la publicidad online que permite que, al colocar un anuncio, te genere ingresos sin tener que estar presente.
Teniendo en cuenta estos factores, es posible obtener dos de las cosas más importante: dinero y tiempo. Tiempo para hacer lo que te haga sentir bien, ya sea viajar, estar con tu familia, pasar tiempo con los amigos…
Esta es la esencia del concepto de nómada digital: trabajar online te abre las puertas a generar ingresos y disponer de mayor tiempo para ti. Con estas dos cosas, puedes hacer lo que quieras.
Diferentes nómadas digitales
El factor común a los nómadas digitales es internet. Desempeñan su trabajo a través de este medio y merced a las nuevas tecnologías de la información. A partir de ahí, debemos tener claro que no todos los modelos de negocio o trabajo, sean el mismo. Podemos, por lo tanto, encontrar tres tipos de nómadas digitales en función de ese modelo.
Freelance, autónomo o trabajador por cuenta propia. Este es un nómada digital que ofrece servicios al que se contrata para que haga un trabajo. Estos trabajos pueden ser de cualquier tipo, desde sacar unas fotos hasta escribir artículos o llevar la contabilidad. Siempre y cuando se trate de servicios que puedan brindarse online, la persona contratante, no tiene por qué acudir a la oficina.
Es muy habitual en asesores, consultores, psicólogos… que en el caso de tener que contactar, utilizan la videollamada.
Otro tipo de nómada digital es el emprendedor. Este modelo de trabajo, incluye la generación de ingresos pasivos mediante publicidad o los infoproductos que no son otra cosa que, productos digitales en el que el creador explica o transmite su conocimiento.
Se trata de un producto digital que puede distribuirse por internet sin apenas costes. Por ejemplo, un e-book que contenga una guía de turismo, un audiolibro, app para móvil… Una vez creado el producto, se distribuye y comercializa. A partir de ahí, se generan ingresos y no es necesario estar pendiente.
El último de los tipos de nómadas digitales es el que trabaja por cuenta ajena. El trabajo ideal para los más tradicionales y menos aventureros que necesitan tener seguridad y estabilidad laboral. No quieren complicarse la vida emprendiendo o montando un negocio desde cero. El teletrabajo hace posible ser nómada digital formando parte de una gran empresa. Cada vez son más los empresarios que no quieren trabajadores con un horario estricto y la necesidad de fichar in situ. Quieren resultados, cumplir objetivos. Eso puede hacerse desde cualquier lugar.
En conclusión, ser nómada digital es una forma de vida que engloba diferentes aspectos del ámbito laboral y personal. Se trata de una alternativa excelente, una posibilidad que, en la actualidad, es posible. Aunque cabe señalar que no es para todo el mundo porque a todo el mundo, no le interesa estar en continuo movimiento. En tal caso, el teletrabajo brinda las mismas posibilidades, sin caer en el pensamiento de la movilidad constante. Siendo lo mismo, se entienden de manera diferente.
Sobra decir que el cambio que estamos viviendo en lo que a la cultura del trabajo respecta, es importante a muchos niveles. Evidentemente, esos cambios, son positivos en gran medida. Con la desaparición de los modelos de trabajo más arcaicos y tradicionales y la aparición de los nuevos, unidos a una nueva concepción de la forma de trabajar, el concepto de trabajo también ha sufrido un cambio. Cada vez se hace una asociación más positiva al hecho de tener que trabajar y nos alejamos del concepto de obligación que suponía.