Fumar es una de las prácticas más comunes que existen hoy en día y muchos son los asiduos a este hábito. Sin embargo, más allá de ser un alivio a la ansiedad, la cantidad de problemas y enfermedades tanto bucales como de salud en general que causa son extensas.
Uno de los aspectos de nuestra salud que se ve muy afectado por el consumo de cigarrillo es nuestra salud bucal. Por lo mismo, para reducir los efectos negativos lo más que podamos, debemos seguir ciertos cuidados especiales.
Fumar y sus consecuencias en la salud bucodental
El consumo de cigarrillos, masticar tabaco e incluso en pipas, es nocivo para la salud en general. Entre las consecuencias más resaltantes para nuestra salud bucal se encuentran:
- Fumar aumenta la probabilidad de padecer enfermedades periodontales. Esto porque el tabaco muchas veces oculta la inflamación y sangrado de las encías, permitiéndole a las bacterias afectar la encía durante más tiempo, antes de que podamos darnos cuenta del problema y atacarlo.
- Afecta directamente al sistema inmunológico, lo cual hace que las defensas bajen, causando que el cuerpo no pueda atacar a las bacterias y sea más fácil que se creen infecciones.
- Vuelve más lento el proceso de curación de las encías.
- Los dientes comienzan a presentar una clara decoloración y se tornan de un color amarillo opaco.
- Otra consecuencia es que pueden aparecer manchas blancas conocidas como leucoplasia.
- El tabaco promueve la pérdida del soporte y expone la raíz del diente, dejándolo expuesto para la aparición de caries. Además, al fumar tanto, la producción de saliva baja, y sin saliva para combatir la placa, esta es libre de dañar los dientes.
- Al fumar, el paladar se va tornando pálido, se vuelve bastante duro, y hasta pueden aparecer algunos puntos rojos. A estas condiciones se les conoce como síntomas de la isquemia, la cual es una constricción en los vasos sanguíneos producto del consumo del cigarrillo.
Consejos de salud bucodental para pacientes fumadores
Si eres fumador, pero igual te preocupa cuidar tu salud bucal, el Consejo de Dentistas te ofrece algunos consejos que debes seguir para una sonrisa lo más sana posible:
- Cepillarse adecuadamente: lo normal es cepillarse 3 veces al día, pero cuando se es fumador es bueno mantener una mayor frecuencia, en especial luego de fumar que es cuando hay mayor cantidad de residuos en la boca. Además, al momento del cepillado, se le debe prestar mucha atención a la lengua, ya que es una de las partes de la boca que se ven más afectadas por el cigarrillo, gracias a que el tabaco afecta al paladar y por ende altera el sentido del gusto.
- Hilo dental: Luego del cepillado, se recomienda complementar con el uso de hilo dental, dado que llega a áreas en donde no alcanza el simple cepillado. También, al fumar se es más propenso a sufrir enfermedades periodontales, en cuyo caso el hilo ayudará a remover la placa bacteriana alojada entre los dientes.
- Enjuague bucal: otro complemento importante para el cuidado bucal es el uso de enjuague bucal, ya que gracias al flúor que contiene permite reforzar y cuidar el esmalte de los dientes. Es bueno utilizarlo al menos 2 veces al día para combatir el mal aliento que produce el tabaco.
- Consumir chicle de mascar: masticar algunos chicles sin azúcar puede resultar beneficioso ya que favorecerá el flujo salival, y evitará la resequedad en la boca.
- Mantenerse hidratado: No solo se recomienda el consumo de agua para evitar que la boca se mantenga reseca, sino que además hay que moderar el consumo de alcohol, ya que este disminuye la producción de saliva dejando la boca seca y expuesta a enfermedades.
- Visitar al odontólogo: Este es un consejo que tanto fumadores como no fumadores deben seguir. El odontólogo te ayudará tanto con la salud de tu boca, como con su aspecto estético, realizando blanqueamientos en los dientes, y chequeos que prevengan el desarrollo de enfermedades en las encías.
- Dejar de fuma: De seguro estás cansado de escuchar esto, pero el mejor consejo siempre será el dejar el vicio del cigarrillo. Por supuesto, entendemos que no lo puedes hacer de manera radical, pero si puedes ir disminuyendo la cantidad de cigarrillos consumidos al día, lo cual es el primer paso a seguir para poder dejar esta práctica.
¿Cómo quitar las manchas de los dientes causadas por el cigarrillo?
Uno de los ingredientes más perjudiciales de los cigarrillos es la nicotina, un químico adictivo que adquiere un tono rojizo al reaccionar con el oxígeno. Esta, además de afectar a los pulmones, produce con el tiempo manchas en los dientes que afean y atacan el esmalte.
Lo bueno, es que pueden eliminarse aplicando algunos remedios caseros y tratamientos profesionales de los que hablaremos a continuación:
Remedios naturales
Estos te funcionarán muy bien solo si las manchas de nicotina no son demasiado profundas. Además que hay que prestar especial cuidado a la hora de aplicarlos, ya que sucede que por las características de este tipo de remedios, lo que podemos hacer es dañar el esmalte.
- Bicarbonato sódico
El bicarbonato es un remedio natural muy recomendado para eliminar las manchas de nicotina. Se trata de verter dos cucharadas de bicarbonato sódico en un bol junto a dos cucharadas de limón y dos de sal marina, mezcla a la cual le añadiremos agua poco a poco hasta crear una mezcla sólida parecida a una pasta de dientes. Una vez este lista, la aplicamos en los dientes como si los limpiáramos con ella.
No obstante, cabe acotar que no es un remedio para usar con frecuencia, ya que el exceso de bicarbonato sódico puede tener un efecto adverso y dañar el esmalte de los dientes.
2. Agua oxigenada
El agua oxigenada de 10 volúmenes como máximo funciona como un agente blanqueador de los dientes. La podemos utilizar justo después de cepillarnos los dientes a manera de enjuague bucal.
Otra opción es verter un poco de agua oxigenada en un vaso. Luego, sumergir en el vaso un bastoncillo de los oídos y frotar con él la superficie de los dientes. Poco a poco, estos irán adquiriendo un color más blanco.
La indicación más importante es que solo puedes aplicarlo una vez a la semana, ya que su uso frecuente puede dañar el esmalte de los dientes.
3. Limón como blanqueador natural
El limón es un agente blanqueador natural que puede penetrar en el esmalte de los dientes. Para esto, solo tenemos que exprimir el jugo de un limón, mezclarlo con agua y enjuagamos la boca con la mezcla. Al final, debemos enjuagarnos la boca con agua fría para cerrar los poros del esmalte.
Puedes hacerlo todas las noches, siempre y cuando te cuides de no fumar durante al menos 3 horas después de usar el enjuague con limón.
Remedios profesionales
A veces, cuando las manchas de nicotina son profundas o muy numerosas, nuestra mejor opción es acudir a un especialista para que nos haga una limpieza dental más profunda. Sin embargo, hay más de un tratamiento que tu dentista puede ofrecerte para tal fin. Algunos son:
1. Geles blanqueadores
Los geles blanqueadores dentales son mucho más efectivos que los remedios naturales. Cuando se aplican sobre los dientes, pueden penetrar a través de los poros del esmalte para eliminar todas las manchas de la nicotina o la cafeína. Además, su uso no expondrá el esmalte de los dientes a la erosión.
2. Carillas dentales
Las carillas dentales son una excelente opción para casos extremos. Por ejemplo, si el fumador lleva muchos años sin una limpieza profunda de los dientes, es probable que requiera de unas carillas dentales para eliminar las manchas de nicotina y otros problemas que pudieron haberse originado, como en el caso de la caries dental.
Las carillas dentales se tratan de pequeñas tapas hechas de porcelana que cubren la parte frontal de los dientes. Para ajustarlas, se retira una capa del esmalte y se reemplaza con las carillas. Están hechas de un material que no daña las encías y no causa molestias a los tejidos dentales. Además, las carillas de calidad son resistentes a las manchas de la nicotina.
- Limpieza dental
Las limpiezas dentales deben hacerse de forma frecuente, en la cantidad de veces que lo sugiere tu dentista de confianza. De esta manera, lograrás mantener los efectos del tabaco controlados, limpiando y manteniendo los dientes, y eliminando el sarro y la placa bacteriana.
Prevención sobre las manchas de nicotina en los dientes
Por supuesto, los profesionales en la salud te dirán que la mejor prevención es abandonar el vicio y te ayudarán a encontrar métodos para que puedas abandonar definitivamente este mal hábito.
Ellos te ayudarán y te acompañarán en cada caso para poder ofrecerte la ayuda que necesitarás durante el proceso.
Sin embargo, también se pueden prevenir estas manchas por medio de las revisiones periódicas y los buenos hábitos orales, además de una buena alimentación, buenos hábitos de descanso y la práctica de actividad física.